Concurren en el concepto varios elementos que determinan su relevancia en la oficina moderna. Los peligros que nos acechan se han multiplicado exponencialmente en los últimos tiempos, conforme la crisis económica ha ganado en virulencia y las barreras que protegían nuestra existencia profesional se han debilitado o incluso desaparecido por completo. No menos notable resulta el hecho de que, ante esta situación, muchas personas optan por mirar para otro o, peor aún, por negar la evidencia, instalándose en un territorio a mitad de camino entre la confianza en la providencia del tradicional "Dios proveerá" y la más absoluta irresponsabilidad.
Es, por ello, muy frecuente en nuestros días que, casi de improviso, un peligro o riesgo al que antes no prestábamos atención se convierta en inminente, generándonos la angustía y el sobrecogimiento que siguen al momento en que finalmente "le vemos las orejas al lobo". Los ejemplos van desde los recortes de plantilla (que, como los accidentes de coche, parece que sólo afectan a los demás) hasta el "corralito", singular concepto de origen argentino y que, al menos hasta que empiece la Eurocopa, ha pasado a ocupar el centro de las conversaciones en España.
Puede resultarnos útil para expresar esta idea en inglés recurrir a la locución the writing (o alternativamente the handwriting) on the wall, a la que ya nos referimos en la entrada que dedicamos hace algún tiempo a la construcción ver venir. Decíamos allí que la referencia a "lo escrito en la pared" tiene su origen en un episodio del bíblico Libro de Daniel, en el que el profeta es el único capaz de descifrar la advertencia al rey de Babilonia que aparece escrita en la pared en medio de una de sus francachelas.
El Cambridge Advanced Learner's Dictionary dice de esta construcción que "se emplea para indicar que hay claras señales de que algo fracasará o dejará de existir" ("said to mean that there are clear signs that something will fail or no longer exist").
Ejemplos prácticos:
- Cuando empezó la crisis, muchos inmigrantes que le vieron las orejas al lobo empezaron a volverse a sus paises. When the crisis started, many immigrants who saw the writing on the wall went back to their own countries.
- Antes incluso de que Apple lanzara el nuevo i-phone, muchos de sus competidores le vieron las orejas al lobo y decidieron abandonar el segmento alto del mercado. Even before Apple launched the new i-phone, many of its competitors saw the writing on the wall and decided to give up on the high-end of the market.
- Torres ya no jugaba habitualmente de titular antes de la lesión así que le debía haber visto las orejas al lobo ya entonces. Torres was often dropped from the team even before his injury, so the handwriting was on the wall even then.