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lunes, 26 de enero de 2015

Ponerse el mundo por montera

Otra de las expresiones de origen taurino que hacen referencia al valor, en ocasiones casi temerario, del matador es "ponerse el mundo por montera".  El elemento central de la expresión es la singular gorra o sombrero que llevan los toreros y que, junto con el sempiterno tricornio, constituye probablemente la más singular aportación hispana al mundo del tocado.

A la hora de esclarecer el sentido preciso de la expresión, apuntemos que el Diccionario Akal del Español Actual le asigna el valor de "envalentonarse, reírse del mundo". Por su parte, María Leonisa Casado Conde, en su obra "¡ Se Dice Pronto !" define la expresión como "no importarle a uno lo que diga la gente; hacer su voluntad".

En su uso moderno, la expresión denota que alguien despreció las posibles consecuencias negativas de alguna acción y que la llevó a cabo con decisión y desdeñando lo que les pudiera parecer a otros. Es este el sentido en el que habitualmente lo empleamos en el ámbito profesional, donde dependiendo del contexto puede connotar admiración o censura.  Más frecuentemente nos situamos en una zona intermedia y ambigua, que también hollamos cuando empleamos la sonora expresión "¡ con dos cojones !". Es más frecuente, en todo caso, que impere la admiración, quizá por lo inusual en estos tiempos de asistir a actuaciones arrojadas.

Para expresar esta idea en inglés debemos, en ausencia de otras opciones más precisas, recurrir a una expresión más genérica y aséptica como to throw caution to the wind (que podríamos traducir como "tirar la prudencia por la ventana").  Las definiciones que podemos encontrar para esta locución se refieren simplemente a que se toma algún riesgo ("to take a risk", en el Cambridge Advanced Learner's Dictionary) pero su uso habitual es bastante próximo, aunque menos enfático, que el de la expresión española que nos ocupa.

Ejemplo práctico:
  • Después del lío con el bonus, se puso el mundo por montera y pidió a Recursos Humanos que le buscaran otra cosa aunque supusiera irse al extranjero. After the fuss about his bonus, he threw caution to the wind and asked Human Resources to find him another job even if it meant moving abroad.
  • Se han puesto el mundo por montera y han traído otra vez a Pepe para intentar mejorar las ventas.  They have thrown caution to the wind and brought Joe back to try to improve sales.

miércoles, 21 de enero de 2015

Lameculos

Analizaremos hoy la figura del "lameculos", uno de los perfiles humanos más abominables que pueblan el ecosistema laboral de cualquier empresa, con independencia de su tamaño o línea de actividad.  Se trata de un personaje de especial interés en estos tiempos en los que resulta deprimente comprobar hasta donde se pueden rebajar las personas en la adulación de sus superiores y, especialmente, en la aceptación de lo inaceptable.

Es, desgraciadamente, éste un perfil tan extendido en nuestra sociedad que aparece incluso recogido en el Diccionario de la Real Academia Española que lo define de forma precisa y simple como "persona aduladora y servil".   El servilismo es definido en otro lugar como la "ciega y baja adhesión a la autoridad de alguien".  Por su parte, el Diccionario de Uso del Español, luego de indicar el evidente carácter grosero del término, se contenta con hacer equivaler "lameculos" a "adulador".

El lameculos no es, obviamente, una criatura de naturaleza intrínsecamente hispánica por lo que no resulta difícil encontrar en la lengua inglesa expresiones que definan a estos siniestros personajes. Apuntemos inicialmente que, en este caso, podemos emplear la traducción más literal, arse/ass licker, muchas veces empleada con guión.  El Cambridge Advanced Learner's Dictionary nos indica que se trata de un término empleado para referirse a una persona que se intenta aprovechar de otras tratándolas con una extremada amabilidad que es falsa ("a person who tries to get an advantage from other people by being extremely pleasant to them in a way that is not sincere").

Existen, sin embargo, otras dos expresiones en inglés muy cercanas conceptualmente a la que nos ocupa en castellano y cuyo uso recomendamos con este sentido. La primera es arse kisser (literalmente "besaculos"; también existe la variante butt kisser), que incorpora el culo como elemento de referencia pero sustituye la acción de lamer por otra más cariñosa pero de parecido sentido en este contexto. El American Heritage Dictionary of the English Language define el concepto to kiss ass, en su forma americana, como "to act submissively or obsequiously in order to gain favor" ("actuar de forma servil u obsequiosa para obtener favores").  Nótese la diferencia con el empleo imperativo de los mismos términos (kiss my ass) que equivale más bien a nuestro "que te den", como apuntamos en la entrada que dedicamos a esta última expresión.

La segunda (brown noser) es mucho más refinada conceptualmente, si reflexionamos un momento sobre como han tomado las narices la tonalidad amarronada que evoca la expresión. Además puede utilizarse también como verbo, en cuyo caso conviene utilizar siempre el guión, to brown-nose.  El Diccionario Collins define el concepto de forma contundente como "comportarse de forma abyectamente servil" ("to be abjectly subservient").

En la misma línea, podemos emplear la construcción to be up someone's arse o también las similares to have one's head (o tongue) up someone's arse, que dejan poco a la imaginación.   Recordemos que, dentro de este ámbito de improbables excursiones anales, existe también en inglés la expresión to be up one's own arse que es equivalente a nuestro "creerse el rey del mambo", expresión a la que ya hemos dedicado una entrada específica.

Para completar el panorama con otra expresión no tan cercana formalmente pero de parecido significado, tenemos también suck-up, que podemos utilizar así, con guión y como sustantivo, pero también declinar como verbo (to suck up).  El CALD recoge la locución verbal to suck up to someone con el valor de "buscar la aprobación de un superior haciendo y diciendo cosas que le agraden"  ("to try to make someone who is in authority approve of you by doing and saying things that will please them").  En otras palabras, lamiéndole el culo.

Ejemplos prácticos:
  • Era un lameculos tremendo; siempre decía en los comités de inversiones lo mismo que acababa de decir el jefe. He was a real ass kisser; in the investment committees he would always repeat what the boss had just said.
  • Siempre está dispuesto a comer con la jefa y hasta la lleva al aeropuerto en coche si hace falta; un auténtico lameculos. He's always ready to lunch with the boss and even drives her to the airport if needed; a real brown noser.
  • Paco le ha lamido tanto el culo a Tomás que es seguro que le darán el ascenso.  No he visto un pelota igual en mi vida.  Frank's so far up Tom's arse that he's certain to get that promotion. I've never seen such a "yes man" in my life.
  • Se pasó el verano lamiendo culos por todos los departamentos y consiguió que le contrataran cuando se le acabó la beca. He spent the summer sucking up around the office and managed to get a contract when his internship finished.

lunes, 19 de enero de 2015

Coger el toro por los cuernos

Parece apropiado que iniciemos nuestro recorrido por las expresiones de origen taurino con la expresión "coger el toro por los cuernos" pues, como se verá, esta arrojada actitud es imprescindible para abordar cualquier labor, especialmente si la misma incorpora dificultades o sinsabores añadidos.

Conviene notar que, en la moderna tauromaquia española, agarrar los cuernos del astado es suerte desusada, más allá de algún gesto puntual de cara a la galería, situado a mitad de camino entre la temeridad y la chulería, aunque generalmente más bien en terrenos claramente ventajistas.  Por lo demás, es actitud más propia de los grotescos, y hoy casi desaparecidos, espectáculos cómico-taurinos protagonizados por personajes singulares como El Platanito o El Bombero Torero.

Cosa bien distinta ocurre en Portugal, donde pervive la noble tradición de los forcados, autores de espectaculares "pegas" a cuerpo limpio, como la de nuestra ilustración de hoy. La tauromaquia portuguesa es ciertamente pintoresca pero, dada la creciente adulteración de la Fiesta en nuestro país, no conviene desdeñar sus valores éticos y estéticos.

Pero centrémonos en el uso habitual de la expresión en el enrarecido ambiente laboral de nuestras oficinas. Con frecuencia nos encontramos con situaciones complicadas en el ámbito laboral que nadie parece querer confrontar y resolver, limitándose los implicados a "dar largas" o "marear la perdiz". Se requiere entonces de alguien que coja el toro por los cuernos, locución que el Diccionario de la Real Academia Española define como "enfrentarse resueltamente a una dificultad".

Claro que ello requiere de la concatenación de tantos factores (identificar certeramente la dificultad, tener la capacidad de resolverla y hacerlo con decisión, sin importar los riesgos aparejados) que muchos de los lectores quizá no hayan tenido ocasión de presenciar una acción de esta naturaleza a lo largo de su carrera profesional y menos aún protagonizada por alguien que pudiera evitar hacerlo.

Puede parecer extraño, dada la nula tradición taurina del mundo anglosajón, pero es éste uno de los pocos casos en que podemos traducir nuestra expresión de manera casi literal al inglés y decir to take the bulls by the horns (o alternativamente to grab the bulls by the horns).  El Cambridge Advanced Learner's Dictionary define esta locución como "to do something difficult in a brave and determined way" ("hacer algo difícil con valor y determinación").

Ejemplo práctico:
  • Estaba claro que se tenía que tomar una decisión pero nadie quería coger el toro por los cuernos. It was clear that a decision had to be taken but no-one wanted to take the bull by the horns.
  • Cogió el toro por los cuernos a finales del año pasado, recortando los costes de personal sustituyendo empleados a tiempo completo por otros a tiempo parcial y becarios.  He took the bull by the horns at the end of last year slashing the company's wage bill by switching from full-time employees to part-timers and interns.
  • ¿ Por qué no coges el toro por los cuernos y le mandas a tomar por culo ?  Why don't you grab the bull by the horns and tell him to fuck off ?

viernes, 16 de enero de 2015

Pasarse de listo

Dedicábamos nuestra entrada del pasado miércoles al molesto personaje del listillo, tan habitual en nuestras empresas.  Centramos hoy nuestra atención en un comportamiento frecuente en la oficina moderna que se relaciona precisamente con ese irritante perfil, aunque incorpora algunos matices interesantes.

Nos referimos a "pasarse de listo", locución verbal que recoge el Diccionario de la Real Academia Española con el valor de " intentar mostrarse en algo más inteligente que otros y estar equivocado".  Difícilmente puede establecerse con más precisión la naturaleza de esta conducta.  En primer lugar intentamos demostrar nuestra superioridad intelectual sobre los demás para quedar después en situación comprometida por estar equivocados o confundidos en nuestras apreciaciones o actuaciones.

En nuestras oficinas asistimos con mucha frecuencia a comportamientos de esta naturaleza, normalmente inspirados por la soberbia intelectual de sus autores.  Esta se basa generalmente más en el desprecio por las capacidades ajenas que en la exaltación de las propias, aunque no faltan entre nosotros quienes consideran que no han obtenido ningún premio Nobel más por falta de dedicación que de aptitudes.

Existe en inglés británico una expresión muy similar para referirnos a estas actuaciones.  Se trata de to be too clever by half, que también podemos encontrar como too smart by half, aunque es mucho menos habitual  El Cambridge Advanced Learner's Dictionary la define como "tener demasiada confianza en la propia inteligencia, de una forma que irrita a otras personas" ("to be too confident of your own intelligence in a way that annoys other people").   Está documentado el uso desde antiguo de by half con un valor genérico de "en exceso" aunque hoy casi sólo pervive en este expresión.

La locución "pasarse de listo" incorpora a la conducta una implícita consecuencia negativa que se hace más evidente en algunas de sus formas verbales.  Cuando decimos de alguien que "se pasó de listo", por ejemplo, damos a entender que le salió el tiro por culata y que no consiguió los objetivos que pretendía.  Esta connotación aparece también en la expresión inglesa too smart for his/her own good.  Se emplea para denotar que la creencia de que lo sabemos todo termina por perjudicarnos.

Ejemplos prácticos:
  • El jefe estaba flipado con él al principio pero luego se dio cuenta de que se pasaba de listo.  The boss was really impressed with him at first but later realized that he was too clever by half.
  • Me caen muy bien los portugueses en general pero los que trabajan en finanzas suelen ser unos sobrados y se pasan de listos.  I tend to like Portuguese people but those working in finance are usually full of themselves and too clever by half.
  • Vale, fue a Cambridge y tiene mucho talento pero a veces se pasa de listo.   Ok, he is a very talented Cambridge man but he can be too smart for his own good.

miércoles, 14 de enero de 2015

Listillo

Cualquier oficina o departamento que se precie cuenta en sus filas con, al menos, un listillo o, más frecuentemente en estos tiempos, una listilla. Se trata generalmente de personas que operan en esa zona amplia y difusa que existe entre el joven pero sobradamente preparado y el gilipollas integral (especie muy distinta, como se sabe, del gilipollas a secas).  Los conocimientos del listillo son generalmente notablemente menores que su imprudencia y su sentido de la oportunidad directamente proporcional a su sentido común (es decir, bastante escaso).

Si bien el Diccionario de la Real Academia Española no recoge el vocablo, sí lo encontramos en el Diccionario de Uso del Español que afirma que se trata de un término informal, usado generalmente de forma despectiva para referirse a la persona que presume de saber o estar enterada de todo.

Una vez más, no nos enfrentamos a un tipo humano exclusivo de las Españas y no ha de sorprendernos, por ello, que el idioma inglés nos ofrezca varias formas de referirnos al mismo con un sentido muy próximo. La más recomendable es quizá smart arse, también en su forma norteamericana smart ass, literalmente "culo listo".  El Cambridge Advanced Learner's Dictionary asocia esta construcción a "alguien que siempre intenta parecer más listo que los demás de una forma que resulta molesta" ("someone who is always trying to seem more clever than other people in a way that is annoying").

En la misma línea, podemos utilizar también smart aleck/alec que hace, al parecer, referencia a Aleck Hoag, un siniestro personaje decimonónico.  El CALD recoge también esta expresión con el valor de "alguien que intenta parecer inteligente o contestar preguntas de una manera inteligente que molesta a otras personas" ("someone who tries to appear clever or who answers questions in a clever way that annoys other people").

Más suave resulta la construcción smarty-pants, en cuya definición en el CALD ("someone who wants to appear to be clever") no aparece ya ninguna referencia a la molestia o pesadez de la conducta.  Nos encontramos ahora más cerca de lo que queremos decir en castellano con sabelotodo o sabihondo, concepto que tal vez tenga mejor acomodo en inglés en la palabra know-it-all, que en su uso habitual no incorpora de forma tan clara la malicia (o incluso maldad) del listillo.  En todo caso, las definiciones que aporta el DRAE para sabelotodo o sabihondo ("que presume de sabio sin serlo") no están muy distantes del concepto de "listillo".

Ejemplos prácticos:
  • ¡ Deja ya de hacerte el listillo ! Stop being such a smart arse !
  • Su abogado es un listillo; se pasó la reunión haciéndonos comentarios gilipollescos. Their lawyer is such a smart ass; he spent the meeting bullshitting us.
  • Es una listilla que pretende enseñarnos como tenemos que invertir la cartera. She is a smarty pants and always tries to teach us how we should invest the portfolio.
  • Su hijo es un sabihondo que conoce todos los dinosaurios del museo. Her son is a know-it-all who can name every dinosaur in the museum.

lunes, 12 de enero de 2015

Moderna Tauromaquia. Introducción

La tauromaquia, entendida como "arte de lidiar toros" como la define el Diccionario de la Real Academia Española, no ha sido históricamente exclusiva de la Península Ibérica.  En buena parte del arco mediterráneo existen vestigios que atestiguan su práctica desde la Edad de Bronce.  El origen griego del vocablo nos recuerda las escenas taurinas que encontramos en la cerámica cretense de la época minoica.  La Roma clásica también conoció de las luchas con uros en sus circos.

Fue en la Edad Media cuando la tauromaquia comenzó a adquirir en nuestro país un carácter más organizado, como entretenimiento popular pero también como actividad profesional de las personas dedicadas al traslado para su sacrificio de las reses, en muchos casos bravas.  En los siglos XVIII y XIX, los espectáculos van adoptando las características que configurarán la moderna corrida de toros, tal y como hoy se sigue practicando en nuestro país y algunos otros lugares (singularmente, México, Colombia y algunas localidades del sudeste francés).

En todo caso, la importancia de la tauromaquia en nuestra cultura es incuestionable, al margen de las consideraciones éticas que puedan merecer determinados aspectos de la misma.   Toros y toreros están omnipresentes en nuestras artes y nuestra historia, incluso reciente, con una notoriedad pública que puede resultar chocante para quienes nos visitan.

Es, por ello, inevitable que nuestro lenguaje coloquial haya incorporado multitud de expresiones de origen taurino que empleamos cotidianamente, casi sin reparar en ellas.   De hecho, hoy en día muchos de los hispanohablantes, especialmente los más jóvenes o los que proceden de países sin tradición taurina, ignoran incluso la relación que con la lidia puedan tener expresiones como "dar largas" o "rematar la faena", además de desconocer su sentido preciso.

Muchas de estas expresiones resultan, además, muy características de nuestro idioma y nuestra forma de expresarnos, hasta el punto de situarse en ocasiones en terrenos tan idiosincráticos que resultan casi imposibles de traducir a otros idiomas.

Por ello, nos disponemos a tratar, en una serie que denominaremos Moderna Tauromaquia, algunas de las expresiones de origen taurino más empleadas en la oficina moderna.   En las próximas semanas, esclarecemos su significado preciso, indagando en algunos casos en los aspectos técnicos de la tauromaquia que resulten relevantes para entender su empleo en un determinado sentido.  Finalmente, intentaremos proponer algunas construcciones de la lengua inglesa que nos puedan resultar útiles para expresar en ésta el sentido incorporado en las locuciones españolas que vayamos abordando.

viernes, 9 de enero de 2015

Darse autobombo

En los tiempos modernos, exaltar en público las propias cualidades o detallar los propios logros a la menor ocasión son actividades que no merecen el juicio crítico de otras épocas más modestas o quizá sólo más pudorosas.  Pueden ser incluso muy necesarias en entornos profesionales hostiles, en los que mantener una mínima autoestima constituye la última línea de defensa frente a la autocompasión individual o colectiva.

Sin embargo, existen auténticos profesionales de darse o hacerse autobombo, cuya actividad laboral o incluso social gira alrededor de la glosa de las propias virtudes o el relato, generalmente exagerado sin recato, de cualquier realización alcanzada en el pasado. Esta autopromoción constante suele perseguir obtener favores o gracias de la superioridad y, por ello, suele caracterizar el comportamiento laboral de medradores de toda condición.

Utilizamos para referirnos a esta actividad la muy gráfica palabra "autobombo", que el Diccionario de la Real Academia Española define de manera concisa como "elogio desmesurado y público que hace alguien de sí mismo".

Curiosamente, en este contexto el inglés utiliza también una referencia a un instrumento musical, aunque abandona la percusión por el viento. Efectivamente, si queremos trasladar este concepto al inglés recomendamos utilizar la expresión to blow one's own trumpet (literalmente, "soplar o tocar la propia trompeta") que, a pesar de que pueda parecer pintoresca, es de uso bastante extendido y origen antiguo.  El Cambridge Advanced Learner's Dictionary asigna a esta locución el valor de "relatar con orgullo los propios logros" ("to tell everyone proudly about your achievements"), que parece ciertamente más aséptico que el de la expresión castellano.

Nótese que en los Estados Unidos es más frecuente utilizar una variante de esta expresión, to blow one's own horn, que originalmente no hace referencia al cuerno como tal sino al instrumento musical con esa forma. Hoy, por extensión, se utiliza horn para referirnos a numerosos instrumentos de viento, especialmente el saxofón, y también para la bocina del coche, lo que explica la curiosa señal de nuestra fotografía.

Ejemplos prácticos:
  • Me caía bien el nuevo de sistemas cuando llegó pero en seguida me di cuenta que lo único que hacía era darse autobombo. I used to like the new IT guy when he first arrived but soon I noticed that all he did was blow his own trumpet.
  • En lugar de intentar explicar nuestra propuesta y la estructura del equipo, se pasó toda la reunión dándose autobombo. Instead of explaining our proposal and the team structure, he spent the entire meeting blowing his own horn.

miércoles, 7 de enero de 2015

Hay gente pa to

No hay quizá mejor manera de empezar un año que promete seguir lleno de crispación en muchos frentes que con el toque de tolerancia displicente que aporta la frase que abordamos hoy. En un país donde el éxito parece sonreír a personajes sectarios y broncos, quizá no esté de más reivindicar, al menos por un día, el respeto al otro como base de la convivencia.

Pocas cosas pueden, sin embargo, repugnar más al autor que el relativismo moral que puede confundirse con la tolerancia mal entendida.  Permítasele, por ello, complementar la idea anterior con una rara observación lúcida de Fernando Arrabal : "Los fanatismos que más debemos temer son aquellos que pueden confundirse con la tolerancia".

Entrando en materia, la expresión que hoy nos ocupa tiene su origen, según todas las fuentes consultadas, en una anécdota de origen taurino. Tras finalizar un festejo en Madrid, un diestro (según algunos Rafael Gómez Ortega "El Gallo", para otros Rafael Guerra "Guerrita") fue presentado a José Ortega y Gasset. Al preguntar el torero qué hacían los filósofos y contestarle uno de los presentes que se dedicaban a pensar, el coletudo le espetó: "Hay gente pa to".

Como se observará, se trata de una frase que combina una cierta sorpresa por las actividades ajenas con una tolerancia más bien desdeñosa. Con parecido sentido se usa también en castellano la frase "de todo hay en la vida del Señor" o su versión más resignada, "de todo tiene que haber en la viña del Señor".

Esta última construcción se incorporó, al parecer, a nuestra lengua a principios del siglo XVII cuando el poeta y clérigo dominico Fray Hortensio de Paravicino predicó un sermón en Sevilla con ocasión de una visita de Felipe IV a la ciudad. En el mismo, para hacer notar la certeza de que en la vida hay tanto cosas malas como buenas, observaba:

De todo tiene la viña,
Sacra y Real majestad,
De todo tiene la viña:
Uvas, pámpanos y agraz.

Para los no versados en materia vitivinícola, aclaremos con ayuda del Diccionario de la Real Academia Española que los pámpanos son los sarmientos verdes de la vid y agraz hace referencia a los rácimos de uvas verdes.

La misma idea puede expresarse en inglés con la sencilla locución it takes all sorts to make a world, que podría traducirse libremente como "tiene que haber de todo en este mundo". La expresión es de uso muy frecuente en inglés y por ello puede utilizarse su versión abreviada it takes all sorts, omitiendo por evidente la segunda parte de la construcción.

El Cambridge Advanced Learners' Dictionary nos indica, en efecto, que la expresión se emplea para "enfatizar que la gente tiene diferentes personalidades, opiniones y habilidades, lo que debe ser aceptado" ("said to emphasize that people have different characters, opinions, and abilities, and that you should accept this").

Dada la dificultad que los españoles tenemos para diferenciar en nuestra pronunciación sort y short, podemos asegurar el tiro diciendo it takes all kinds (to make a world), perfectamente correcta y que encontramos incluso con más frecuencia en los Estados Unidos.  En todo caso, para el que no se resigne a renunciar a pronunciar correctamente short, nunca viene mal un poco de ejercicio.

Nos encontramos con el hecho curioso de que la expresión inglesa tiene, al parecer, su origen en la lengua castellana. Efectivamente, la construcción se incorpora al inglés a partir de la traducción que de la segunda parte del Quijote hizo Thomas Shelton en 1620, concretamente de este pasaje lleno de sabiduría que encontramos en el capítulo VI:
No todos los caballeros pueden ser cortesanos, ni todos los cortesanos pueden ni deben ser caballeros andantes: de todos ha de haber en el mundo, y aunque todos seamos caballeros, va mucha diferencia de los unos a los otros.
Que Shelton convierte en: 
All knights cannot be courtiers, nor can all courtiers be knights-errant, nor need they be. There must be all sorts in the world; and though we may be all knights, there is a great difference between one and another.
Es preciso apuntar que, al igual que ocurre en castellano, la expresión, especialmente en su forma abreviada, incorpora cierta desaprobación o desagrado a la sorpresa que suscitan las conductas a las que se refiere.  Si queremos emplear una expresión más aséptica podemos recurrir a la construcción each to their own (que también encontramos en sus formas each to his own y to each his/their own), más próxima a nuestro "para gustos, los colores".

Nos referiremos, finalmente, a una curiosa expresión británica que también puede resultar útil en este contexto aún cuando su uso ofrece algunas complicaciones como se verá.  Se trata de la construcción there's nowt as/so queer as folk, originaria del norte de Inglaterra y sobre la que el CALD nos indica que se emplea para indicar que la gente se comporta en ocasiones de manera muy extraña ("said to emphasize that people sometimes behave in a very strange way") como puede deducirse de su sentido literal ("no hay nada más raro que la gente").

Conviene notar que la palabra nowt,  equivalente a las más habituales nothing o nought, es empleada casi únicamente en el norte de Inglaterra, por lo que puede resultar extraña o ridícula en otras latitudes. Además, la palabra queer, junto con sus valores tradicionales como "raro", "extraño" o "excéntrico", se ha venido empleando también para referirse a los varones homosexuales con cierto tinte despectivo por lo que la expresión apuntada debe administrarse con prudencia.

Ejemplos prácticos:
  • Mis vecinos se pasan el invierno con las ventanas abiertas de par en par. Hay gente pa to. My neighbours keep their windows wide open during the winter. It takes all sorts.
  • No puedo entender como alguien ve esos programas sobre el cambio climático pero está visto que para gustos, los colores.  I can't believe that anyone actually watches those programmes on climate change, but each to their own, I guess.
  • Después de tres años de pedirlo todas las semanas, cuando le ofrecieron trasladarse a Madrid, lo rechazó.   Hay gente pa to.   After three years of demanding it every single week, when they finally offered him to move to Madrid, he rejected the proposal.  There's nowt as queer as folk.

lunes, 5 de enero de 2015

working language vuelve con el año nuevo


"Año nuevo, vida nueva" es aforismo antiguo.  El siempre interesante Refranero Multilingüe del Centro Virtual Cervantes afirma que recurrimos a esta expresión al comenzar el año para manifestar el propósito de cambiar de costumbres o de otras cosas, indicando también que tal intención no es siempre mantenida.

Lo cierto es que, tras muchos meses de silencio, nos proponemos retomar la tarea iniciada hace ya casi cinco años y que no es otra que aportar las expresiones que consideremos más adecuadas para trasladar al inglés la misma idea o connotación que incorporan algunas de las principales frases de uso habitual en el ámbito laboral.  No es otra intención la que se esconde detrás de la fórmula "inglés práctico para la oficina moderna" con la que definimos nuestro blog.

Nos seguiremos centrando, lógicamente, en aquellas construcciones que ofrezcan mayor interés por parecer más propias de nuestra lengua y resultar, por lo tanto, más difíciles de expresar en otro idioma de manera efectiva.  Aunque, como señalábamos hace tiempo en nuestra introducción, nuestro objetivo nos obliga en ocasiones a elucidar el contenido preciso de la expresión española en cuestión, nuestra intención sigue siendo eminentemente práctica.   Se trata, en definitiva, de contribuir a ampliar las capacidades lingüísticas de nuestros lectores, incorporando a su repertorio nuevas expresiones de uso frecuente en el desempeño profesional.  Por ello, y para orientar en su uso adecuado, proporcionamos siempre ejemplos ambientados en el contexto laboral.

Tras este mínimo recordatorio, parece apropiado que dibujemos un mínimo plan para las próximas semanas pues, de otro modo, se multiplicarán las posibilidades de que este nuevo arranque sea efímero.  Nos proponemos, por una parte, volver a publicar, mínimamente corregidas y aumentadas, las entradas que forman parte de la dilatada serie que, a lo largo de los años, hemos dedicado a las expresiones de origen taurino, de las que nos sentimos singularmente satisfechos.

La expresión "hay gente pa to" ha conocido fortuna entre los habituales comentaristas de esta página, con los que esperamos seguir contando en adelante.  En parte por ello, vamos a ir publicando también una serie de entradas dedicadas a los variopintos especímenes de la raza humana que pululan por nuestras empresas, ensayando una sociología parcial de tan enrarecido ecosistema.  Algunas de estas entradas serán ampliaciones de las que en el pasado ya hemos dedicado a estos tipos humanos tan frecuentes como difíciles de soportar (listillos, lameculos, iluminados, etc.).  Ensayaremos también el estudio de algunos que aún no han merecido nuestra atención.

A pesar de haber ya publicado más de trescientas entradas, sigue siendo amplio el número de expresiones que aún no hemos abordado con la necesaria profundidad.  Intentaremos seguir ampliando nuestros horizontes pero pedimos disculpas anticipadas a nuestros seguidores habituales si, en estas primeras semanas del año, se encuentran sobre todo con versiones nuevas de entradas que ya conocen.  Si echan de menos material nuevo, podemos asegurarles que como dijo aquel "estamos trabajando en ello".

En todo caso, y como siempre, todos los comentarios son bienvenidos.  En el pasado, las aportaciones de nuestros amables lectores han hecho muy grato para el autor el tiempo dedicado a escribir y corregir estas páginas, además de contribuir de forma decisiva a mejorarlas.  Sólo nos queda expresar nuestra gratitud y hacer votos para que, en las próximas semanas, estas páginas vuelvan a incorporar también el intercambio de opiniones que aún puede verse en muchas de las entradas ya publicadas.